Natalie BOOKCHIN
Banco de datos de lo cotidiano
1999
E.U.A.

Biografía

Natalie Bookchin es una artista que trabaja con medios nuevos y tradicionales. Exhibe su trabajo, imparte conferencias y con frecuencia, hace performance en los Estados Unidos, Europa y en el espacio cibernético. En 1998 y 1999, expuso su obra en Francia, Suiza, Inglaterra, los Estados Unidos, España, Los Países Bajos, Alemania, Mace-donia y Canadá. Fue incluida en la primera muestra de arte electrónico organizada por Creative Time de Nueva York para su exposición anual en el Brooklyn Bridge Anchorage.

Docenas de publicaciones internacionales y de los Estados Unidos han difundido su obra, incluyendo el New York Times dentro y fuera de la red, Artforum, Berlin Tax, Die Tageszeitung; también por el ABC National Radio de Australia y las televisoras de Francia y Canadá. Estudió en Nueva York, en el Programa Whitney de Estudios Independientes y en la escuela del Art Institute de Chicago.

Descripción Conceptual

Databank of the Everyday examina la muerte de la fotografía en la era electrónica, donde no es más que un dato adicional en una base de datos. El proyecto pide su forma prestada tanto a una base de datos de computadora como a un catálogo de fotografías de archivo. A partir de la actual retórica que rodea a la computadora, con su promesa de un flujo sinfín de información, Databank presenta la base de datos insuperable, sin límites concebibles: una base de datos de la Vida misma. Sin embargo, al igual que el cine y la fotografía, medios del siglo XX, proporcionaron modelos singulares para representar el movimiento humano y el cuerpo (congelados o capturados en fotografía y atrapados en el movimiento lineal del cine), Databank propone que la computadora tiene su propio modelo para representar el cuerpo humano - un circuito. La vida se representa como una serie de circuitos llevados a cabo por el cuerpo, muy parecida a los circuitos simples que se llevan a cabo por un programa de computadora. El cuerpo, atrapado en sus circuitos, es como una máquina descompuesta que se ha vuelto ineficiente por sus deseos, hábitos y compulsiones. Con lo último en la retórica fin-de-siècle, Databank perpetúa con vehemencia la actual histeria que rodea a las nuevas tecnologías. Una vez más, presenciamos una revolución y una vez más escuchamos sonadas declaraciones acerca de la universalidad del cambio y la transformación de la vida cotidiana. (La historia, como sabemos, también se repite como en un circuito.) Así, de acuerdo a la tradición, y ciñéndose a los movimientos avant-garde de principios del siglo XX, Databank, proclama su propio Manifiesto del siglo XXI.